MWCC y DS Ranking, continuando con el análisis de la calidad de vida en las principales ciudades del mundo, y tras los informes sobre el indicador general y el coste de vida, han analizado los servicios sanitarios de las principales ciudades del mundo.
La clasificación analizada expone que Palma de Mallorca (1), Bilbao (3), Alicante (5), Murcia (8), Valencia (10) o Madrid (12) son siete de las doce ciudades con mejor sanidad en el mundo. A continuación aparecen Barcelona (25), Zaragoza (35), Sevilla (41) o Las Palmas de Gran Canarias (49).
España acapara, de esta forma, las primeras posiciones y se sitúa a la cabeza mundial en la prestación de este servicio básico para cualquier sociedad y que es una muestra del bienestar y de la calidad de vida de que disfrutan sus ciudadanos.
Así se deprende de los datos ofrecidos por la plataforma Numbeo que recoge la valoración que realizan los ciudadanos sobre los servicios sanitarios de que disfrutan a través de ocho indicadores.
El primero de los ellos hace referencia a los “Conocimientos y competencia de los profesionales sanitarios” en el que Palma de Mallorca es la ciudad en la que mejor aparecen valorados, seguida de Bilbao, Murcia, Taipéi y Oporto. Esto pone de manifiesto la buena preparación recibida y no es acorde con la valoración de las universidades españolas en rankings como el de Shangai en el que sólo la Universidad de Barcelona (45) aparece entre las cien primeras.
A continuación se valora la “Agilidad en la elaboración de diagnósticos e informes” en la que Palma de Mallorca vuelve a ser primera y por detrás aparecen Seúl, Osaka , Taipei y Luxemburgo.
La mayor satisfacción con los recursos materiales con los que cuentan los centros sanitarios -“Modernidad de los equipos” – vuelve a estar liderada por Palma de Mallorca, dos ciudades holandesas son segunda y tercera – Roterdam y Ámsterdam-, mientras que Singapur es cuarta y Osaka quinta.
Un aspecto relevante dentro de estos servicios, relacionado con la competencia profesional de los profesionales, es la “Precisión de los informes médicos” ya que permite conocer y tratar adecuadamente las enfermades. Palma de Mallorca vuelve a ser primera a continuación aparecen Bilbao, Taipéi, Roterdam y Seúl.
Dentro de la valoración se recoge también la “Simpatía y cortesía del personal” que, aunque no sea un elemento propiamente dicho de la sanidad, si es un factor que permite valorar la calidad de cualquier servicio. En este caso son los profesionales de Bilbao los que reciben la mejor puntuación, seguida de Palma de Mallorca, colándose Medellín en el tercer puesto y Tokio e Eindhoven cuarta y quinta respectivamente.
El “Tiempo de espera en las citas médicas” es el sexto de los indicadores valorados en el que las cinco ciudades mejor posicionadas son Palma de Mallorca, Taipéi, Seúl, Osaka y Roterdam. Este indicador tiene una doble cara; por un lado, como los profesionales son capaces de cumplir con un horario ya establecido en cada cita, pero, por otro, no se tiene en cuenta la personalización del servicio que es el tiempo necesario que cada caso requiere y que puede ser mayor del inicialmente previsto, lo que retrasaría la atención de las siguientes citas afectando al tiempo de espera para ser atendido.
La relevancia social de los servicios sanitarios y su relación con el bienestar de la población está estrechamente ligada a su acceso, por esta razón, consideramos que la “Satisfacción con el coste” es un componente fundamental para valorar la sanidad. Ofrecer un servicio sanitario universal de calidad no depende tanto de las ciudades sino de la política sanitaria del país, pero si puede valorarse la relación calidad-coste del servicio en cada una de ellas, aunque esté último sea gratuito. Leeds, Palma de Mallorca, Glasgow, Edimburgo y Valencia son las ciudades con mejor valoración, por lo que podemos decir también que Gran Bretaña y España son los países con mejor satisfacción por parte de su población en este indicador.
Por último, y con gran transcendencia, se valora la “Ubicación de los centros sanitarios”, es decir, si se dispone de algún centro cerca lo que está relacionado, en el caso de sistemas públicos de sanidad, con la inversión de recursos. En este caso, la población de Bilbao, Leeds, Taipéi, Madrid e Eindhoven son las que mejor valoran sus posibilidad de acceder a una infraestructura sanitaria.
En cuanto a la sanidad española en su conjunto, lo más valorado es la competencia de los profesionales médicos -Palma, Bilbao y Murcia-, el coste de los servicios -Bilbao, Madrid y Barcelona – y la ubicación de los centros sanitarios -Bilbao, Madrid y Barcelona- salvo excepciones en este último como Murcia y Alicante donde cae la satisfacción.
Por el contrario, la valoración en relación con los tiempos de espera, salvo Palma de Mallorca, cae de forma notable – Zaragoza, Barcelona, Madrid-, así como el tiempo en la elaboración de diagnósticos e informes -Barcelona, Sevilla, Zaragoza-. En cuanto a la simpatía y cortesía del personal este aspecto varía de unas ciudades con muy buena valoración en Palma de Mallorca y Bilbao y peor en otras como Madrid, Valencia y Barcelona.
La Organización Mundial de la Salud elabora un ranking de países en el que España aparece posicionada séptima, por detrás de Francia, Italia, San Marino, Andorra, Malta y Singapur. La opinión de los ciudadanos de las ciudades de estos países recogidas en el ranking las posiciona en este orden: París (22), Lyon (26), Milán (51), Singapur (52) y Roma (96).
Podemos concluir que, dado el posicionamiento de las ciudades españolas en el ranking, España disfruta de los mejores servicios sanitarios en el conjunto de indicadores analizados.
