MWCC acude a la entrega de la placa de Passivhaus Institute a la primera reshogar sostenible de España. Este reconocimiento convierte al edificio en la primera residencia tipo hogar de España para personas con discapacidad con certificación de eficiencia energética Passivhaus.

La mencionada certificación garantiza un nivel de confort clase A según Ashrae-ISO-7730, que se traduce en:

  • Demanda de calefacción y refrigeración inferior a < 15 kWh/(m²a).
  • Instalación de envolvente térmica aislante, así como ventanas y puertas con baja transmitancia para minimizar ruidos, puentes térmicos e infiltraciones de aire.
  • Hermeticidad inferior a 0,6 renovaciones de aire por hora.
  • Sistema de ventilación mecánica con recuperación de calor instalado.
  • Condiciones de humedad relativa entre el 45 % y 55 %.
  • Nivel de CO2 entre 400 y 800 ppm. Prevención de contagios y eliminación de olores.
  • Mantenimiento de temperatura entre 20-21ºC durante el día y 15-17ºC por la noche.

Entre los beneficios, destaca el mínimo impacto medioambiental dada la reducción del consumo a menos de la mitad, disminuyendo la huella de carbono para reinvertir todo el ahorro en más platos de comida o mayores ratios de personal.
Cabe señalar que 15 toneladas de CO2 no emitidas equivalen a la plantación de 700 árboles. Asimismo, 6.000 euros menos de gastos anuales en suministros como calefacción, refrigeración y electricidad ofrecen margen para la contratación de 400 horas extra de apoyos personalizados.

También es importante el confort acústico y térmico que otorga la envolvente hermética, aislando el edificio para generar un clima muy cómodo, con temperaturas entre los 20-21ºC. Las puertas y ventanas de triple acristalamiento con baja transmitancia minimizan los puentes térmicos e infiltraciones de aire. Este nivel de confort permite que las personas con discapacidad vivan en un ambiente cálido en invierno y agradable en verano, a la par que tranquilo, pues el bajo nivel de ruidos reduce la aparición de conductas problemáticas desencadenadas por factores contextuales.

Además, este centro innovador promueve la salud de las personas gracias a un sistema de ventilación mecánica que filtra el aire de forma eficiente, eliminando la contaminación y los contagios por virus o bacterias sin empleo de combustibles fósiles.
De hecho, el edificio cuenta con unas condiciones de humedad óptimas y niveles de CO2 recomendados.

La mencionada unidad de tratamiento facilita la entrada de 100 % del aire exterior, con una eficiencia energética superior al 85 % y producción de agua caliente sanitaria. Tal y como se ha señalado anteriormente, la capacidad para recuperar el calor latente minimiza la necesidad de humidificar en invierno y facilita el enfriamiento necesario en verano, garantizando una fuga máxima del 0,45% del caudal de aire (en cumplimiento de la norma UNE EN 308:1997), muy por debajo del umbral de comparación mínimo también indicado por REHVA de 1-2% para recuperadores de flujo cruzado y rotativos.

Asimismo, se ha respetado la filosofía Passivhaus Plus o Premium respecto a las renovables, realizando el encargo de placas fotovoltaicas que produzcan energía más allá del autoconsumo. De este modo, se propone una instalación de 30 placas con una potencia de 500 W, aprovechando la potencia del inversor híbrido y toda la superficie sin sombra de la azotea para mejorar el mix eléctrico del país. Según cálculos simplificados, las fotovoltaicas generarían el 51’5 % de Energía Primaria de todo el edificio, lo que se considera un buen valor.

El Proyecto de reshogar también se ha diseñado teniendo en cuenta las opiniones de las propias personas usuarias. Por ejemplo, existen diferentes modalidades de habitaciones en función de los deseos y preferencias (intimidad, vivir en pareja…). El 50 % de las habitaciones son individuales hasta agotar la edificabilidad. De acuerdo con la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad (ONU, 2006), se apuesta por hogares adaptados, con zonas verdes y sectores de convivencia que recuerden al entorno familiar.

Por otra parte, el estudio de mercado y análisis de viabilidad otorgaron cierto carácter diferencial frente a la competencia, apostando por un tipo de centro alineado con la Estrategia Madrileña de Atención a Personas con Discapacidad para la concertación de plazas públicas.

Todas estas estrategias hacen que la entidad se haya anticipado a futuros problemas de sostenibilidad, encontrando el punto de equilibrio para crear una reshogar humana, pero con la suficiente cobertura de plazas que garanticen la supervivencia económica, sin llegar a crear una macroinstitución donde vivan cientos de personas.

Todo ello sin olvidar el impacto generado por la generación de 30 puestos de trabajo en un Distrito de modesto nivel socioeconómico o el mantenimiento de PYMES y otros proveedores que prestarán servicios a la reshogar, pues las/os usuarias/os también son clientes y consumidores que hacen uso de los recursos propios del barrio (van a la compra, colaboran como voluntarias/os, organizan celebraciones, realizan acciones de sensibilización o proponen mejoras de accesibilidad que benefician a mucha más gente, enriqueciendo la base social al generar una comunidad respetuosa con la diversidad).

La creación de un hogar de atención integral especializado en personas mayores con discapacidad intelectual o del desarrollo responde, por tanto, a un riesgo explícito detectado en el colectivo, facilitando el cumplimiento de derechos fundamentales, la atención personalizada, el desarrollo de la autonomía y la permanencia en el entorno habitual.

CÍRVITE ha sido la primera entidad en “abrir camino” para huir de un modelo de construcción precipitado y cortoplacista que a veces impera por la falta de recursos. La iniciativa ha sido reconocida como Buena Práctica en varias convocatorias de premios.